ELENA YORDANOVA KAPAROVA

La vida es un camino, también es un sólo tramo del todo el largo viaje de nuestra existencia. A veces se nos brindan oportunidades de entender las incógnitas y los porqués de la Vida misma, de crecer tanto en plan personal, emocional y profesional, como espiritualmente. Precisamente una experiencia así fue para mí lo de hacer este curso. Aprendí buscar y saber distinguir la milagrosa fuerza del amor, llegué a la convicción que no hay mayor satisfacción moral y personal en la vida, que la de querer y poder ayudar a los demás en la eterna búsqueda de la felicidad, de las soluciones de los problemas y de la paz interior…